viernes, 16 de septiembre de 2011

La clase de los gemelos



Películas como "Tú a Boston y yo a California" han plasmado lo difícil que puede resultar diferenciar a gemelos ,incluso para los propios padres, y las peripecias que pueden llegar a maquinar los pequeños con tal de salirse con las suyas. Pero, ¿y si en vez de tener que "lidiar" con una pareja de gemelos lo tuvieras que hacer con cinco en la misma clase? ¿Te volverías loc@?



No se trata del argumento de una nueva película de Disney sino el día a día de las profesoras de un colegio de Bridlington, Yorkshire. Y es que una sexta parte de los nuevos alumnos... ¡son gemelos! y por casualidades de la vida los 10 niños están en la misma clase. ¿Será una pesadilla para sus maestros?



Ellos reconocen que para nada. Y es que tan sólo 4 de ellos tienen un gran parecido y ya tienen trucos para reconocerlos.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Riocabado, el pueblo de los pares

¿Será cosa del agua? Es el comentario que, de forma jocosa, los habitantes de Riocabado utilizan habitualmente para explicar el elevado porcentaje de gemelos y mellizos que hay en el pueblo. Sea por cuestiones genéticas, por casualidad o, como ellos dicen, por el agua de la fuente –es de los pocos municipios de La Moraña donde se puede beber agua del grifo-, lo cierto es que en una localidad de unos 190 habitantes hay 18 pares de gemelos o mellizos y rara es la familia en la que no ha habido algún parto múltiple.


No todos viven allí, sino que residen en Ávila capital o en Madrid, pero sus ascendientes sí son de Riocabado y continúan acudiendo hasta la localidad los fines de semana y vacaciones.


Este sábado, coincidiendo con las fiestas en honor a la Virgen de la Natividad, se celebró la primera Quedada de Gemelos y Mellizos, organizada por la Asociación Juvenil, Cultural y Deportiva ‘7 Barrios’.


Teorías hay para todo y los participantes en este encuentro coinciden en señalar que es cada tercera generación cuando aparecen los pares. Fernando y Félix Herrero nacieron en 1953. Su bisabuelo, como explica Fernando, era gemelo, como ellos, y una de sus hermanas también tiene mellizos. Ahora su hija, María, también asegura tener asumido que cuando se quede embarazada “seguramente sean dos” y afirma que es la primera pregunta que se hacen las futuras madres en Riocabado.


“Hace 70 años era difícil que en un parto múltiple los niños sobrevivieran, no se criaba uno, cuanto más dos”, señala Fernando, quien recuerda que “muchos gemelos y mellizos fallecieron”.

Dos por uno

Curiosidades y anécdotas no faltan. Miguel Ángel Moreno y Montserrat Soto tienen dos niñas gemelas de 11 años, Alba y Lidia. “Tenemos otro hijo de 16 años y cuando fuimos a por la niña, como en las ofertas, vinieron dos”, dice Montserrat, quien recuerda que, al recibir la noticia, ella se quedó “comiendo un bocadillo de calamares y el padre llorando”. “Llorando, no, pero me puse tan nervioso que no sabía sacar el coche y todo el mundo pitando”, replica él, destacando también que pasaron “miedo en el embarazo” por ver cómo evolucionaba y que las niñas “se adelantaron un mes y pesaron 1,9 kilos al nacer”, por lo que tuvieron que estar en incubadora.


“Ahora me dicen: me vas a tener que traer agua de tu pueblo, que no me quedo embarazada, y ya saben, vienen dos”, bromea Montserrat.


En el caso de esta familia, el abuelo materno de Miguel Ángel también era gemelo y proceden de una familia en la que había incluso trillizos. Su hermana, además, tiene mellizos.


Cristina y Laura tienen 20 años y también son gemelas. “Lo mejor es la compañía”, dice Laura. “Y que tienes a alguien de tu misma edad a quien contarle tus problemas, que además son los mismos”, añade su hermana. “Y lo peor, que te confundan”, coinciden.


Las dos últimas en sumarse a esta curiosa lista son Alba y Sara, dos pequeñas nacidas en el mes de julio.


Nunca se ha hecho un estudio sobre el por qué de esta elevada tasa de embarazos gemelares en un pueblo tan pequeño, pero, enterada de este encuentro, la abulense Eugenia San Segundo, miembro del Laboratorio de Fonética del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se ha trasladado hasta Riocabado para tratar de encontrar gemelos y mellizos -hombres- que le ayuden a completar su tesis doctoral, centrada en las características de la voz en los pares.